COMENTARIO DE RAEL:
Para aquellos que creen que la higiene, las mascarillas, las vacunas y lavar todo con alcohol les hará vivir más tiempo…
Un ermitaño iraní, apodado el “hombre más sucio del mundo”, ha fallecido a la edad de 94 años en el pueblo iraní de Dejgah, según anunciaron el domingo los medios de comunicación estatales. El hombre, cuyo apodo era Tío Haji, al parecer estuvo unos 67 años sin lavarse y sólo comía comida podrida.
Según la agencia de noticias IRNA, Haji optó por evitar ducharse por miedo a que se enfermara. Su compromiso de no bañarse era tan fuerte que incluso una vez se tiró de un coche cuando los aldeanos locales intentaron llevarle a un río para que se lavara, según el medio.
Además de tener aversión al agua y al jabón, Haji también sentía aversión por el agua y los alimentos frescos, y afirmaba que su comida favorita era el puercoespín podrido y otros animales muertos en la carretera. El agua que bebía solía proceder de los charcos cercanos y la bebía de una lata de aceite oxidada. El hombre vivía en una cabaña de ladrillo abierta y prefería fumar heces de animales en una vieja pipa en lugar de tabaco.
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